Hace ya un tiempo puse una receta de ajoblanco, una exquisita sopa fría a base de pan, alemendras, agua bien fría, ajo, buena aceite, buen vinagre, toda una espléndida receta malagueña. Se me ocurrió convertirla en helado y tomarla como un ligero entrante y de verdad está buenísima. La he acompañado de soja frita, uvas peladas y palitos salados. Además he rociado el helado con un poquito de crema de balsámico y creedme queda un entrante muy elegante y muy bien recibido. Probadlo. Además con esta original receta quiero participar en el evento que Zorra tiene ahora en su blog sobre cocina de vacaciones y buenos recuerdos. Qué mejor recuerdo que un delicioso helado hecho sobre la base de una de las sopas frías más deliciosas y conocidas de España, con su origen en Málaga ha pasado fronteras y se ha convertido no sólo en un exquisito primer plato sino tambien en un aperitivo, en un delicado chupito. Sobre una base tan tradicional, mil combinaciones que nos harán recordar con gusto este verano.
HELADO DE AJOBLANCO
Ingredientes para 6 personas:
Para el helado
250 gr. de almendra molida
1 diente de ajo grande o 1 cucharadita de ajo en polvo
2 rebanadas de pan de molde sin corteza
½ dl. de vinagre de Jerez o de vino blanco
1 dl. de aceite de oliva suave
3 dl. de leche
2 dl. de nata líquida
sal y pimienta
250 gr. de almendra molida
1 diente de ajo grande o 1 cucharadita de ajo en polvo
2 rebanadas de pan de molde sin corteza
½ dl. de vinagre de Jerez o de vino blanco
1 dl. de aceite de oliva suave
3 dl. de leche
2 dl. de nata líquida
sal y pimienta
Para la guarnición
uvas peladas
soja frita
palitos salados
crema de balsámico
Preparación: Poner en un bol el pan con la leche y dejar unos minutos. Añadir la almendra molida, el ajo, el vinagre y batir bien. Ir añadiendo el aceite y seguir batiendo. A continuación añadir sal y pimienta. Seguidamente y con varillas manuales añadir la nata y mezclar bien. Rectificar el razonamiento, teniendo en cuenta que igual que en los helados dulces, los sabores quedan disminuidos por el frío. Una vez hecha esta crema, poner en heladora. En caso de no utilizar heladora lo ponemos en un recipiente a helar y cuando esté a medio congelar lo sacamos, lo removemos bien o lo batimos para romper los cristales y volvemos al congelador. Podemos hacer esto otra vez más y dejar hasta que esté helado. Servir como entrante o aperitivo con unos granos de uva pelados, soja frita y palitos salados. Rociar en el último momento con un poco de crema de balsámico
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